
Algo que hace apenas 100 años era pura ciencia ficción, hoy es una parte integral de la medicina moderna: la robótica en la cirugía. Las publicaciones sobre la cirugía robótica y sus aplicaciones se están multiplicando rápidamente, con un potencial prometedor en todas las especialidades.
Exploremos los casos de uso y los beneficios de la cirugía robótica, los procedimientos más habituales y los factores relativos a las tendencias actuales y futuras.
¿Qué es la cirugía robótica?
La cirugía robótica se refiere al uso por parte de un cirujano de sistemas robóticos al llevar a cabo un procedimiento. Por lo general estos procedimientos son mínimamente invasivos y conducen a una mayor precisión que con los métodos convencionales.
Aunque los sistemas robóticos son una parte importante de estos métodos quirúrgicos, no pueden operar de forma independiente. Los cirujanos y expertos humanos siguen trabajando entre bastidores o junto con los robots para programarlos y mantener el control. Un miembro de Sermo dice: “La mayoría de los pacientes y muchos médicos piensan que tú solo pulsas un botón del láser para hacer una operación de cataratas y que todas son iguales y que hacer la operación no requiere ninguna destreza.” La supervisión humana y las acciones que hay detrás de la cirugía robótica son una parte importante del proceso.
La evolución de la robótica en la cirugía
El papel de la robótica en la medicina ha evolucionado de manera exponencial desde su inicio. Un médico de Sermo señala que “La tecnología que hay detrás de la cirugía robótica es increíble. Empecé a utilizar la cirugía robótica a mediados de los años 90, cuando el sistema de Intuitive Surgical llegó al mercado.»
En 1985, el Dr. Yik San Kwoh llevó a cabo biopsias neuroquirúrgicas con el robot PUMA (Programmable Universal Machine for Assembly 200). Fue la primera vez que un cirujano utilizó una plataforma robótica en un paciente humano. Poco después, el profesor Brian Davies, del Imperial College London, adaptó el PUMA para hacer procedimientos urológicos y de próstata.
AESOP 1000, el primer modelo de brazo robótico, recibió la autorización de la FDA en 1994. Cuatro años después, Computer Motion introdujo el sistema ZEUS, con brazos e instrumentos controlados por el cirujano. Ese mismo año, cirujanos de la Cleveland Clinic en Estados Unidos utilizaron por primera vez la plataforma ZEUS para un procedimiento de anastomosis uterina.
En el 2001, la operación Lindbergh marcó un hito importante en la cirugía robótica: los cirujanos utilizaron el robot ZEUS y el sistema de telecolaboración SOCRATES para llevar a cabo una colecistectomía en Estrasburgo (Francia) desde Nueva York. Jacques Marescaux llevó a cabo el procedimiento de 54 minutos de duración sin ningún problema técnico ni retrasos destacables.
Poco antes, en el año 2000, la FDA autorizó el primer robot da Vinci, que ahora es uno de los sistemas más utilizados en el sector. Tenía tres brazos: uno para el endoscopio y dos para los instrumentos. En el 2002, reconociendo los beneficios de contar con un instrumento adicional, la FDA autorizó una versión con cuatro brazos.
Y así llegamos al presente, con el da Vinci 5, el modelo más avanzado del líder del sector, Intuitive Surgical, que supera a los modelos anteriores con imágenes avanzadas, mayor destreza de los instrumentos y una mejor ergonomía. El sector de los productos sanitarios es cada vez más competitivo y ya hay otras herramientas robóticas que están a la altura del da Vinci 5.
Ventajas de la cirugía robótica: tres beneficios
Hay ensayos recientes que indican que la cirugía asistida por robot mejora los resultados en los pacientes, reduce la duración del ingreso y disminuye la fatiga quirúrgica. A continuación profundizamos en los beneficios de la cirugía robótica:
1. Mejores resultados en los pacientes
La cirugía asistida por robot reduce las complicaciones intraoperatorias y posoperatorias. Por ejemplo, los datos de 18 ensayos controlados aleatorizados muestran que, en comparación con la prostatectomía radical abierta, la prostatectomía radical asistida por robot produce menos recaídas bioquímicas y mejoras a corto plazo en la calidad de la recuperación y el dolor (hasta seis semanas después de la intervención).
2. Menor duración del ingreso
La cirugía robótica a menudo conduce a una estancia más corta en el hospital en comparación con la cirugía abierta convencional. Esto significa un menor coste de la hospitalización.
En un ensayo que incluyó a 29 cirujanos de nueve hospitales del Reino Unido se descubrió que los pacientes que recibieron cirugía asistida por robot estuvieron ingresados durante un promedio de ocho días, dos días menos que con la cirugía abierta convencional. El estudio también indica que la cirugía asistida por robot consiguió una reducción del 52 % en la tasa de reingresos.
3. Menos fatiga quirúrgica
La fatiga tiene una relación muy cercana con los errores quirúrgicos. Los sistemas de cirugía robótica ayudan a reducir la fatiga de los cirujanos a través de mejoras ergonómicas, restricciones mínimas para el movimiento de los instrumentos, visualización estable y asientos cómodos.
Por ejemplo, en un estudio sobre la cirugía robótica publicado en el Journal of Gastrointestinal Surgery se ha demostrado que, en comparación con la laparoscopia tradicional, las intervenciones asistidas por robot disminuyen sistemáticamente la activación muscular (medida por EMG) y reducen la carga mental de trabajo (medida con el método NASA-TLX y la frecuencia cardíaca). Esto significa que los médicos tienen más energía y obtienen mejores resultados.

Tres tendencias en la robótica para los cirujanos
Las publicaciones y las aplicaciones en torno a los robots quirúrgicos se están multiplicando rápidamente. Aquí puedes echar un vistazo a tres tendencias en esta área y al futuro de la cirugía robótica:
1. Sistemas robóticos miniaturizados
Cuanto más pequeño sea el sistema robótico, menor es la repercusión del trauma quirúrgico, lo cual se corresponde con un aumento de la precisión.
La miniaturización ofrece ventajas claras respecto a la cirugía abierta. En un estudio prospectivo publicado en Diseases of the Colon & Rectum, 30 pacientes sometidos a hemicolectomía derecha o izquierda con un sistema quirúrgico robótico miniaturizado no tuvieron ninguna conversión a cirugía abierta, ningún acontecimiento adverso relacionado con el sistema y la tasa de morbilidad global fue baja. Además, la estancia media de los pacientes en el hospital fue de tan solo dos días.
2. Inteligencia artificial y aprendizaje automático
La inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático (ML, de machine learning) están revolucionando la cirugía robótica en todas las especialidades. Veamos varios casos de uso:
Posicionamiento del implante específico para el paciente en artroplastias de rodilla/cadera
El sistema robótico MAKO utiliza la IA para convertir las TAC prequirúrgicas en modelos de articulaciones tridimensionales. Sus algoritmos de ML optimizan el tamaño del implante, la alineación y el balance ligamentoso durante las artroplastias totales de rodilla y cadera.
En un estudio publicado en PLOS One se ha demostrado que la tecnología da lugar a una mejor precisión del posicionamiento de los componentes, lo que redujo el posicionamiento inadecuado del componente glenoideo del 68,6 % al 15,3 % en la artroplastia de hombro.
Realidad aumentada (AR, de augmented reality) en 3D dirigida por IA en los trasplantes renales
Los módulos de visión computarizada con IA procesan las TAC prequirúrgicas para generar reconstrucciones tridimensionales de la vasculatura del receptor. Durante la operación, la AR superpone estas reconstrucciones en la pantalla de la consola del robot, alineándolas con el seguimiento de los instrumentos en tiempo real y permitiendo unos movimientos más precisos.
Colocación del componente glenoideo con IA en la artroplastia de hombro
Para las artroplastias totales de hombro, el software de IA combina los datos de las TAC o las RM prequirúrgicas con el seguimiento en tiempo real. Guía los brazos robóticos en la preparación del hueso y para la colocación de los implantes glenoideos en base a las imágenes existentes de la articulación.
3. Telecirugía
Los cirujanos cada vez llevan a cabo más cirugías a distancia. A nivel mundial, los sistemas actuales con potencial de telecirugía incluyen:
Hinotori
Hinotori es un sistema de cirugía asistida por robot multipuerto de un solo brazo. En agosto del 2020, la PMDA (agencia de productos farmacéuticos y médicos de Japón) autorizó Hinotori para los procedimientos urológicos. En octubre del 2022, su autorización se amplió a la cirugía general y la ginecología.
En dos estudios comparativos—uno publicado en el Journal of Robotic Surgery y el otro en el Journal of Endourology—con el sistema da Vinci para la nefrectomía parcial y la prostatectomía radical no se encontraron diferencias en los resultados perioperatorios.
KangDuo
SuZhou KangDuo Robot Co. creó el sistema robótico KangDuo (KD-SR-01) como un sistema de cirugía robótica para las intervenciones urológicas.
En un ensayo prospectivo aleatorizado con 100 pacientes se desveló que el sistema KangDuo no era inferior al sistema da Vinci para la nefrectomía parcial en tumores T1a. Otra comparación entre da Vinci y KangDuo para la prostatectomía radical asistida por robot ofreció resultados funcionales y oncológicos a corto plazo similares, aunque la duración de las intervenciones fue más prolongada con KangDuo.
Microport Medbot
Los sistemas robóticos de MicroPort MedBot comprenden varias plataformas de cirugía asistida por robot, y Toumai de MicroPort tiene la mayor serie de procedimientos de telecirugía en humanos. Durante un procedimiento laparoscópico de ligadura de la vena espermática en el Hospital Popular de Kezhou en Xinjiang, la consola estuvo controlada por un cirujano del centro de telemedicina del hospital afiliado a la Universidad Médica de Nanjing, a una distancia de casi 3800 kilómetros.
Las cuatro intervenciones con cirugía robótica más habituales
Como explica un médico en Sermo, “Los procedimientos urológicos, torácicos y ginecológicos se están haciendo con la ayuda de la robótica y, de hecho, se hacen muy bien con el sistema robótico.» Para dar más contexto, a continuación enumeramos varios ejemplos de cirugía robótica y procedimientos habituales:
1. Cirugía ginecológica
Los cirujanos suelen hacer las histerectomías asistidas por robot de forma habitual. En un metanálisis publicado en el Journal of Robotic Surgery se indica que la histerectomía asistida por robot se asociada a una estancia más corta en el hospital, una menor pérdida de sangre y menos complicaciones en comparación con la cirugía abierta.
2. Cirugía urológica
En un estudio publicado en Medical Science Monitor se muestra que las prostatectomías asistidas por robot dan lugar a una menor pérdida de sangre, menores tasas de transfusiones y una tasa más alta de procedimientos con neuropreservación en comparación con las prostatectomías abiertas y laparoscópicas.
3. Cirugía cardíaca
Un grupo de investigadores encontró que, en términos de seguridad, la reparación de la válvula mitral asistida por robot es comparable a la esternotomía convencional y otros procedimientos mínimamente invasivos. Pero los investigadores señalan las ventajas de la tecnología en la reducción de los casos de fibrilación auricular, estancias más cortas en UCI y en el hospital, menos dolor y una recuperación más rápida.
4. Cirugía ortopédica
En un estudio publicado en el Journal of Clinical Medicine, las artroplastias totales de cadera (ATC) asistidas por robot se asocian con mejores resultados radiológicos, especialmente en lo que se refiere al posicionamiento del componente acetabular. La asistencia robótica también se asocia con una menor tasa de discrepancia de longitud de miembros. Sin embargo, los resultados funcionales entre la ATC robótica y la convencional siguen siendo ambiguos, sin una ventaja sistemática en las medidas de resultado referidas por los pacientes (PROMs).

¿Sustituirán los robots a los cirujanos?
El uso de los robots en las intervenciones quirúrgicas y en otros procedimientos está aumentando. Los analistas prevén que el mercado de los dispositivos quirúrgicos robóticos pasará de los 7840 millones de dólares del 2024 a 8890 millones en el 2025, con una tasa de crecimiento anual compuesto del 13,4 %.
Pero el crecimiento de este campo no implica que los robots vayan a asumir el control. Los sistemas robóticos no son autónomos, lo que significa que se necesitan cirujanos humanos expertos para hacer las operaciones. Aunque el futuro de la cirugía robótica es incierto, creemos que, en un futuro próximo, estos sistemas seguirán siendo dependientes de las personas.
Además, la robótica no funciona en todas las especialidades. Un médico de Sermo compartió lo siguiente: “Soy cirujano bariátrico y la realidad es que la cirugía robótica me lleva más tiempo y termina costando mucho más por caso. En otras especialidades es diferente”. Y según un sondeo de Sermo, solo el 8 % de los médicos utilizan la robótica en su consulta, mientras que tecnologías como la IA y la telemedicina son más habituales.
Descubre cómo ven los sistemas robóticos otros médicos uniéndote a Sermo
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Sermo es la mayor comunidad de médicos del mundo. Los médicos pueden comunicarse sobre los temas que son importantes para ellos y para sus pacientes. Únete a la conversación con 1,5 millones de médicos sobre la evolución de las publicaciones relacionadas con la cirugía robótica, y también podrás echar unas risas a lo largo del camino.
Preguntas frecuentes
¿Es la cirugía robótica mejor que la tradicional?
La cirugía robótica frente a la tradicional no es un debate real. La cirugía robótica no es “mejor” ni “peor” que la tradicional, se trata de una herramienta a tener en cuenta. Para ciertos procedimientos, los investigadores asocian la asistencia robótica con una menor duración del ingreso, un menor coste y mejores resultados en los pacientes.
¿Es segura la cirugía robótica?
El riesgo varía en función del procedimiento. Si bien la mayoría de las cirugías asistidas con robot han tenido tasas de complicaciones muy bajas, ciertas tecnologías en evolución, como la telecirugía, pueden presentar más riesgos.
¿Pueden hacer intervenciones quirúrgicas los robots sin un cirujano?
La principal desventaja de la cirugía robótica es que todavía requiere supervisión humana. Aunque la autonomía de los sistemas robóticos está aumentando con el avance de la tecnología, todavía no ha llegado el primer sistema quirúrgico que sea totalmente autónomo.